Pompeya

Cuando el Vesuvio entra en erupción, arrasa con todo... Pompeya:

De qué va?!
Milo (Kit Harington), un esclavo convertido en gladiador es llevado a luchar a Pompeya, donde encontrará al amor de su vida y donde presenciará como la erupción del Vesuvio amenaza con sepultar la ciudad.

Y... qué tal?!
Paco: Paul W. S. Anderson, director de parte de la saga de Resident Evil y Alien Vs. Predator, nos lleva a la época de la Roma clásica para enseñarnos cómo el Vesuvio destruyó Pompeya. O eso es lo que a primera vista nos ofrece la película. En realidad, el volcán no es más que una excusa para contar, y sobre todo, para ponerle punto y final a una historia más sobre gladiadores. Recordando en gran parte a la épica Gladiator, Pompeya es una película de acción que no aporta nada nuevo, lo cual, en este caso, no es malo, porque tampoco lo pretende. Al final solo busca ser una cinta palomitera que nos haga pasar un rato entretenido. Aunque si que es verdad que hemos visto entretenimientos mejores. 5,5/10 

Ele: Entretiene y no se hace larga, pero no hay mucho que destacar sobre ella. No diría que es una película imprescindible de ver. Los actores no transmiten absolutamente nada. El protagonista Kit Harington en el papel de Milo (por mi parte conocido solamente por su papel de Jon Nieve en la serie Juego de tronos), muestra las posibilidades de cada músculo de su cuerpo, lo cual es muy agradable a la vista, excepto las de la cara. Lo mismo ocurre con su amada Emily Browning, en el papel de Cassia, que comparte la misma inexpresividad facial.
Los efectos visuales están muy bien. Pero lo mejor de la película, que por mi parte sería la secuencia de erupción del volcán, resulta todo acumulado al final y en un breve espacio de tiempo. Al igual que las luchas de gladiadores que acaban siendo más bien escasas y cortas. No puedes evitar recordar en algunos momentos la gran Gladiator, pero no le llega a la suela de los talones. 6/10.

Trailer: