miércoles, 11 de marzo de 2015

Crónica 12 Muestra Syfy

El pasado fin de semana volvimos a aullarle a la luna y a gritar a pleno pulmón la rima de Canino.
Nuestra crónica de la 12ª Muestra Syfy. Una de las que menos sangre ha derramado los últimos años.


Adelantamos el comienzo del fin de semana al jueves y nos plantamos en los cines Callao para el aperitivo de la muestra; Chappie. Había ganas, ya que disfrutamos mucho de District 9 y Elysium. Lo último de Neill Blomkamp, en cambio, nos desconcertó. Las formas del director son una vez más impecables y el cariño con el que trata a la ciencia ficción está fuera de toda duda, pero esta vez ha ido más allá. El querer dotar de alma, o consciencia como lo llaman en la película, a un "robot bebe", hace que determinadas situaciones argumentales que pretenden ser transcendentes y profundas resulten cómicas. Muchos altibajos y una escena final más larga de lo necesario nos terminan dejando un sabor agridulce. Siendo mucho mejor realizador que guionista (esperemos que coescriba el guión), salimos esperanzados de lo que Blomkamp podrá hacer con Alien 5. Lo que está claro es que habrá robots.

El viernes nos zambullimos de lleno en la denominada, por Leticia Doelra, muestra del amor, aunque cinematográficamente sería más bien la muestra de la comedia y las películas lentas. Comedia porque fue el genero que más triunfó y películas lentas porque fue la tónica general en la mayoría de ellas. Comenzamos bien. La neozelandesa Housebound se mueve entre la comedia, el terror y el thriller como pez en el agua. Su protagonista, condenada a arresto domiciliario, se ve obligada, tras varios sucesos extraños, a investigar qué es lo que pasa en casa de sus padres. Y nosotros nos vimos obligados a disfrutarla. A continuación, el japones Shion Sono nos trae la locura, y no en el buen sentido de la palabra. Tokyo tribe es el esperpento. Un músical rapero en el que podemos ver la lucha de bandas por el control de Tokio. Pero como no hay mal que por bien no venga, y llegamos algo cansados, aprovechamos el momento para descansar un poco los ojos antes de las siguientes proyecciones. Más frescos entramos a Burying the Ex. La comedia romántica zombie de nuestro querido Joe Dante de la que salimos encantados. Con buena química entre el trío protagonista y un aire ochentero se convierte en uno de los puntos memorables de la muestra. Entretenimiento perfecto sin pretensiones. Antes de volver a Nueva Zelanda para encontrarnos con la sátira vampírica definitiva, pasan el intenso, recomendable y nada gracioso corto Safari. Lo que hacemos en las sombras es una comedia desatada y desmedida que parodia sin piedad el mundo de los vampiros. En formato documental nos cuenta los problemas de convivencia y de adaptación a la vida cotidiana, de un grupo de chupasangres que comparten piso. Aunque al final se hace un poco larga es muy recomendable y tremendamente hilarante. Tras los vampiros le dijimos hasta mañana al Callao sacrificando los zombis japoneses de Hunger of de dead

El sábado nos recibe Song of the sea. Con una animación diferente, bonita e infantil, la nominada al Oscar, como mejor película de animación, nos arrulló con su canción y su lentitud en la hora de la siesta provocando lo inevitable; un par de cabezadas. Algo más de ritmo y menos intimismo no le habrían venido mal. La interesante sinopsis de Goodnight mommy nos confundió, y nos encontramos con una película larga, lenta y previsible desde el minuto uno. Con escenas sin sentido y pistas inconexas, intentó sembrar la duda en el público y hacerles creer algo, a todas luces, increible. No lo consiguió. La lentitud también fue la nota predominante en Spring. Una película romántica con pequeñas dosis de ciencia ficción y un planteamiento muy interesante. Una muestra de que, con una buena historia no hacen falta muchos efectos especiales. Con promesas de algo más de acción se presentaba la belga Cub. Slasher falto de violencia y sangre que no acaba de explotar la buena ambientación, y el diseño de la genial máscara, para crear un asesino memorable. El resultado es entrenido sin mas. El asesino que asesina poco es el encargado de darnos las buenas noches. Dejamos a las Crazy bitches para otro momento. Se proyectaron dos cortos el sábado; el tétrico y efectista Sangre de unicornio y el incoherente y prescindible 365.

Domingo. Comienzo del fin. Las ondas sonoras con las que L.F.O. pretende hipnotizarnos al final cumplen su cometido. Pero al final, muy al final. Tras la primera hora larga (una vez más la lentitud hace presencia) y un poco tediosa de esta comedia negra obtenemos nuestra recompensa con un tremendo final que hace que mejore nuestra visión global de la película. Bueno, no está mal. Después de las ondas llegan los fantasmas atípicos y faltos de cariño, que respetan las reglas de los vivos, y viajan por las casas a través de los armarios. Básicamente eso es Jaime Marks is deadUn drama sobrenatural que más que congojo o escalofríos, lo que provocó fueron risas en el patio de butacas. Nuevo cambio de tercio para, tras el insulso pero llamativo visualmente corto splintertime, volver a los vampiros. Esta vez es A girl walks home alone at night, el drama escrito y dirigido por la israelí Ana Lily Amirpour, el que nos enseña los colmillos. Una película lenta más, pero que, como pasara el día anterior con Spring, engancha. Rodada en blanco y negro, la película cuenta con la gran interpretación de su protagonista vampira. La cual, una especie de protectora de los débiles ante los abusos de los fuertes, en una de sus vigilancias se encuentra con un hombre que le hace sentir algo diferente. Muy bien. Y así llegamos al final. Entramos al pase de Under the skin, y la organización nos regala el corto Ghost Train  que no estaba programado. Sin duda el mejor de todos los cortos (y muchos largos) que se proyectaron. Tres amigos y su intención de montar en el tren de la bruja en un parque de atracciones abandonado. Vedlo si podéis. Y ahora si, entramos con la clausura. Scarlett Johansson interpreta a una alienígena que caza hombres. Un planteamiento a priori interesante, pero cuando su punto fuerte y carta de presentación es que la protagonista aparece desnuda... la cosa cambia. El principal mérito de la película es ajeno a ella, y es la valentía que ha tenido Scarlett Johansson de aceptar un papel así. Algunos la denominarán cine experimental y aplaudirán su narrativa, pero personalmente creo que es una cinta terriblemente lenta y aburrida, y se pierde en alegorías y escenas interminables y repetitivas para, al final, no contar nada.

Una vez más la Muestra cumple su cometido haciendo bueno el refran de "lo bueno si breve dos veces bueno", nos tiene tres días disfrutando (a veces sufriendo) del cine fantástico y nos deja con ganas de más. Un fin de semana al año que está marcado en nuestros calendarios como inamovible.

Y para terminar, os dejamos un ranking de las tres películas que más nos han gustado:
1º Burying the ex 2º Lo que hacemos en las sombras 3º Spring/A girl walk home alone at night



2 comentarios:

  1. Sin dudarlo suscribo todo lo dicho por el comentarista, resaltando la lentidud de algunas cintas, llegando en algún caso al aburrimiento. Hacer hincapie en el buen ambiente que ha reinado en la muestra. Ha, se me olvidaba, el aparato traductor, se ha de poner en la parte superior de la pantalla, así los que tiene una persona mas alta delante, no tendrán problemas de lectura.

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    1. La verdad es que lo ideal es que estuvieran integrados en la película pero bueno. Todo sea por disfrutar del fantástico.
      Muchas gracias por comentar! Un abrazaco!

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