La coronación de... Godzilla: Rey de los monstruos:
La agencia zoológica Monarch se enfrenta a su desaparición mientras una serie de Titanes, entre los que se encuentran Mothra, Rodan, Godzilla y su némesis Ghidorah, luchan por el planeta.
Y... qué tal?!
Para mí, una de las peores cosas que puedes decir de una película es que es aburrida. Y es el principal problema que tiene este Godzilla. Michael Dougherty, responsables de las geniales Truco o trato y Krampus, toma el relevo del Godzilla de Gareth Edwards. Escribe y dirige una secuela carente de toda personalidad en la que, otra vez, importan más los humanos que los monstruos. Hasta el punto de parar el climax para poner el foco en el drama.
No puedo negar que, aunque lenta, disfruté la primera parte. Me pareció un nuevo punto de vista y una nueva aproximación que valía como tarjeta de visita, como presentación, de este "nuevo" monstruo. Pero en esta secuela me esperaba una evolución, que Godzilla tuviera más protagonismo. Para mi sorpresa me encuentro con que más de media película se la pasan en espacios pequeños y cerrados (bunquer, avión, laboratorio) hablando sobre el sexo de las flores. Nada cambia. Ni el tono, ni el discurso, ni el enfoque. No entiendo el por qué, de la necesidad de hacer de estas películas algo solemne y dramático. Por qué no pueden reconocer, como hizo Kong: La isla calavera, el terreno en el que se mueven?. Y, si no quieres tomar ese camino, que también me parece bien, por lo menos, haz que el ritmo sea más ágil. 5,5/10
Trailer:
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