El cochecito

Me fallan las piernas, necesito... El cochecito:

De qué va?!
Don Anselmo, un anciano ya retirado, decide comprarse un cochecito de inválido motorizado ya que todos sus amigos pensionistas poseen uno. La familia se niega ante el capricho del anciano, pero él está dispuesto a todo para conseguirlo.

Y... qué tal?! 
60 años después podemos disfrutar con la película de El cochecito tal y como se concibió y no con la censura que sufrió en su estreno por la dictadura. La cinta es un drama costumbrista, que encandila con unas risas iniciales y situaciones tan cómicas, como reales. Muy reales. Pero que poco a poco va tornando en tragedia y esperpento de la manera más caprichosa.

El aquelarre inicial de tullidos malhumorados, esos "bordes simpáticos" cuando hacen escarnio en otros, representa, a la vez, el egoísmo y el afan de integración de las personas en situación de riesgos de exclusión social de la época. Y, paradójicamente, por excluir al personaje de Anselmo, interpretado por un enorme Pepe Isbert, propician que los "buenos samaritanos" se aprovechen de él, provocándole entre ambos, una necesidad que no tiene.

La cinta critica, de una manera más o menos amable, dependiendo del personaje, a todas las figuras que intervienen. Pero, sobre todo, a esa vejez hastiada, caprichosa, egoísta e infantil, que nos acerca a niños de pataleta, capaces de hacer cualquier cosa por conseguir lo que quieren, sin pensar en las consecuencias que eso pueda provocar. 7/10

Por aquí os dejo el final, flojísimo en comparación con el original, tal como quedó con la censura. Por si queréis verlo después de ver la película.

Trailer: